La tos en niños causa ansiedad y preocupación en muchos padres, además, de ser el motivo más común en las consultas médicas. Hay que destacar en primer lugar que la tos por sí sola no establece un padecimiento.
La tos es un síntoma que hace parte de una enfermedad, por ello, algunos pediatras se enfocan en encontrar primero si el niño presenta otros síntomas similares o diferentes que puedan indicar la enfermedad que genera la tos, todo esto antes de dar un tratamiento específico y efectivo.
El inicio de la tos se presenta la mayoría de las veces como un problema reciente y de causa innegable, como son los procesos virales de vías respiratorias, que habitualmente no se complican y terminan limitándose con un tratamiento. También existen casos en los cuales los niños presentan una tos diaria, si la tos llega a permanecer más de 4 semanas se considera como tos persistente o crónica.
Debemos tener en cuenta que, como mecanismo de defensa del organismo, la tos actúa eliminando agentes que pueden ser perjudiciales para el cuerpo, por esta razón, no deberían entregar tratamiento para cortarla, salvo en ciertos casos específicos. La tos infantil nunca debe ser medicada de inmediato con jarabes, pues, pueden crear un efecto contrario en la recuperación del niño.
Causas de tos infantil:
- Alérgias diversas (clima, polvo, ejercicio, mascotas, etc.)
- Asma bronquial
- Neumonía
- Bronconeumonía
- Bronquitis
- Bronquiolitis
- Rinitis con goteo retronasal
- Gripe
- Crup (laringotraqueítis)
- Reflujo gastroesofágico
¿Qué es la tos infantil?
La tos es producida por irritación del sistema respiratorio, una bacteria, alergias o por causas ambientales como el humo. También puede originarse por la presencia de mocos, siendo este un mecanismo de defensa del cuerpo para mover las secreciones, mantener limpias y abiertas las vías aéreas.
Aprende a diferenciar ¿Qué tipo de tos tiene tu hijo?
La tos seca es aquella que no presenta secreciones. Esta se produce por la inflamación de la vía respiratoria. La tos seca en niños es muy molesta, suele presentarse especialmente en las noches o cuando el niño se encuentra agitado. Tiende a ser doloroso, porque irrita la garganta.
Tos con flema es el tipo de tos más frecuente que suelen presentar los niños con mayor frecuencia. La tos con flema va acompañada de resfriados y pueden acabar en graves neumonías si no son tratadas a tiempo. Los bebés suelen tragar sus flemas, lo que no resulta malo, al contrario, este mecanismo ayuda a que sean expulsadas.
Tos perruna cuando el aire que pasa por la laringe es expulsado bruscamente se produce lo que llaman tos de foca o tos perruna, se le llama así porque suelen escucharse como afónicos o roncos por la inflamación de las cuerdas vocales.
Tosferina o tos convulsiva esta tos es ocasionada por la bacteria Bordetella pertussis. Puede iniciar como cualquier otro resfriado, pero se prolonga y acaba con ataques de tos que dificultan que el niño pueda respirar.
Tos con sibilancias generada por la inflamación de los bronquios y produce un sonido tipo silbido cuando el aire pasa por estos. Es frecuente encontrar este padecimiento en enfermedades como asma y bronquiolitis, esta tos puede ir acompañada muchas veces de vómitos.
¡Signos de alarma para ir al médico!
Respiración rápida o dificultad para respirar: cuando el niño tose o respira y se presenta hundimiento de costillas y aleteo de las fosas nasales.
Cianosis: el niño cambia su tonalidad de sus labios a un color azul, por la falta de aire.
Estridor: se escucha una tos aguda y fuerte también se produce al inspirar.
Sibilancias: ruidos como silbidos al expulsar el aire.
Fiebre: puede ser muy peligrosa si su duración es de más de 72 horas, especialmente en menores de 3 meses.
Dolor o supuración de oídos: si el niño presenta irritabilidad o decaimiento, se queja de un fuerte dolor cada vez sufre de un ataque de tos y si se presenta mucosidad.
¿Cómo calmar la tos en niños?
Recuerda que la tos es un mecanismo del cuerpo y solo se debe tratar si comienza a deteriorar el estado de salud. Ten en cuenta estos consejos para ayudar a tu pequeño con su tos.
- Mantén la nariz despejada sin taponamientos de mocos, los lavados nasales con suero fisiológico son altamente efectivos, también los humidificadores para mantener la humedad, los ayudará a dormir.
- Dale a beber abundante agua, también sirven los zumos dulces con frutas frescas, estos son ricos en vitamina C. La miel puede suavizar la molestia en su garganta, evita los refrescos de gas.
- Para la tos perruna es eficaz ducharse con agua caliente, el vapor por 20 minutos es muy bueno para la laringe.
- Evita exponer a tus hijos al humo de cigarrillo, quemas y a los cambios bruscos de temperatura.
- En los niños la tos no debe ser tratada con medicamentos “jarabes calmantes”. Primero hay que establecer la causa para ofrecer un tratamiento específico si la tos se agrava.
- Medicamento para la gripe y tos en niños usados contienen codeína, un compuesto cuyo uso causa efectos adversos en los niños. Úsalos con precaución solo si un especialista lo aprueba.
Remedios caseros para la tos en niños
Miel de abejas La miel es un estupendo remedio casero para tratar problemas de tos y garganta irritada. Si tu hijo es mayor de 1 año, prueba darle una cucharada de miel antes de dormir. Otras alternativas son:
- Miel con limón
- Infusión de limón, miel y tomillo
- Jarabe de miel, cebolla y limón
Vapores con mentol el olor del mentol y el vapor ayudan a abrir las vías respiratorias facilitando una mejor respiración. Coloca un recipiente con agua caliente y unas gotas de mentol, acerca a tu hijo a este vapor para que lo respire.
Cebolla es un remedio casero de la abuelita que resulta infalible, el cortar una cebolla y colocarla en el cuarto en el cual tu pequeño duerme, te resultará súper eficaz.
Eucalipto esta planta es muy conocida por sus propiedades medicinales, entre las cuales destaca la cura para resfriados y la tos. Coloca a hervir varias hojas de eucalipto y pon a tu hijo cerca para que respire el vapor.
Previene la tos en niños
La mejor prevención de la tos en niños es el cuidado, no los dejes salir si llueve o hace mucha brisa, tampoco los dejes jugar con agua cuando hace mucho frío, abrigalos muy bien al salir con mal clima. En niños menores de 2 años la lactancia materna exclusiva hasta es primordial para su prevención.
Evita que tus hijos tengan contacto con polvo, humo del cigarrillo, contaminantes ambientales, alfombras sucias, y disminuye el contacto con enfermos respiratorios.
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